Como se suele decir el paso de los años es inevitable, pero envejecer es opcional. Con los tratamientos antienvejecimiento que existen actualmente en Cirugía Estética se puede lucir un aspecto mucho más joven. Hoy vamos a realizar un repaso a los principales signos de envejecimiento y cuál podría ser su tratamiento.
El paso de los años se refleja en nuestro cuerpo de diversas maneras, siendo el rostro la parte más visible. Por suerte, los Cirujano Plásticos cuentan con los conocimientos y un gran arsenal de técnicas para corregir los defectos y hacer frente al envejecimiento. Los procedimientos son cada vez más efectivos y sofisticados, por tanto merece la pena acudir a la consulta para que nos informen sobre los últimos avances y seguir con nuestra frase: envejecer es opcional ahora.
La genética y nuestro estilo de vida son dos factores que influyen mucho en cómo envejecemos. A continuación exponemos los 7 signos de envejecimiento más habituales y explicamos cómo se puede tratar. Aunque algunos de estos tratamientos son mínimamente invasivos y se realizan con anestesia local, pueden lograr excelentes resultados.
7 signos de envejecimiento y su tratamiento
Arrugas. Algunas personas tienen arrugas desde edades tempranas, otros con más suerte sólo las ven aparecer a partir de los 30. Suelen aparecen alrededor de los ojos, que es donde tenemos la piel más fina y delicada. Las líneas finas con el tiempo se vuelven arrugas más profundas y acaban formando las indeseadas patas de gallo. Las arrugas alrededor de los ojos, en la frente o entre las cejas se pueden corregir temporalmente con inyecciones de botox, o bien recurriendo a los lifting faciales cuyos efectos se prolongan durante años.
Bolsas de ojos. La caída de los párpados o la formación de bolsas nos hace parecer cansados, tristes y viejos. Mediante una blefaroplastia logramos cambios sorprendentes, muchos pacientes no salen de su asombro tras la recuperación. Incluso en un área tan delicada y expuesta somos capaces de restaurar el aspecto sin dejar cicatrices visibles. Este tratamiento además se puede combinar con nanoinjertos de células madre (Nanofat o Nanograft) para estimular y forzar la regeneración de la piel, logrando un mejor resultado.
Papada. Cuando la grasa se acumula debajo del mentón se crea la papada. Aunque mantengamos un estilo de vida saludable, con los años es probable que se nos acumule grasa en esta zona. Hacer que desaparezca no es fácil, por tanto podemos recurrir a una pequeña liposucción que aspire los depósitos de grasa que sobran. Tener una mandíbula bien definida nos puede restar muchos años.
Bandas o arrugas en el cuello. El envejecimiento provoca que la piel pierda elasticidad y se descuelgue, dando lugar a un aspecto de cuello de pavo. Este signo de envejecimiento disgusta muchísimo y es frecuente que algunas personas recurran a cuellos altos, pañuelos y otra serie de trucos para disimular. Un lifting de cuello puede estirar la piel y restaurar los músculos logrando un cambio drástico que nos quita muchos años de encima. La operación consiste en restaurar la posición de los tejidos para que vuelva a tener el aspecto de hace unos años si restar naturalidad.
Rostro demacrado o cansado. Si en general hemos perdido volumen facial se puede recurrir al tratamiento con microinjertos de grasa. Es una solución muy utilizada en Cirugía Estética facial y que logra resultados excelentes y muy naturales. Consiste en extraer pequeñas cantidades de grasa de donde le sobra para luego inyectarlo donde necesitamos ganar volumen. De esta manera podemos restaurar los párpados, las mejillas, disimular la línea de marioneta o en la frente para que tenga un aspecto más juvenil.
Manos con manchas y venosas. Las manos son otra parte del cuerpo muy visible, con los años en ellas pueden aparecer manchas en la piel y las venas hacerse más visibles. Estos problemas estéticos también tienen solución, dependiendo del problema existen diversos tratamientos para rejuvenecer la manos. Estos tratamientos pueden forzar la regeneración de la piel o bien rellenar para disimular arrugas.
Pechos caídos. Conforme pasan los años, y sobre todo después de tener hijos, los pechos de las mujeres comienzan a cambiar y a caer. Cuando una se mira al espejo puede sentir que tiene un físico más envejecido de como realmente se siente e incluso puede afectar a su autoestima. Una elevación de pecho puede restaurar su aspecto, y si además recurrimos a las prótesis mamarias podrá tener unos pechos perfectos.
Queda claro que el paso de los años es inevitable, pero envejecer es opcional gracias a todos estos tratamientos y algunos más. Si quieres más información no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Si lo deseas puedes concertar una primera cita informativa sin compromiso con el Doctor Juan Martínez Gutiérrez.